Del Bikini a lunares al Pocketpop *
Confieso haber sido un fan de Viuda e Hijas de Roque Enroll, allá por los cándidos años de la primavera democrática. Tuve los tres discos, y algún poster, y en los bailes escolares, «Lollipop» hacía que ensayáramos nuestros torpes primeros pasos y encaráramos a la más linda de todas (sin suerte, confieso también). Tiempo, bastante tiempo después, la chica que toca la guitarra en la banda de Charly García viene a Montevideo a presentar su nuevo trabajo solista. María Gabriela Epumer, viuda o hija, pasea, casi en solitario, su luto con elegancia.
LadoB… Decime la verda
d, ¿no te molesta esto de estar haciendo notas, o atendiendo a la prensa cada vez que vas a tocar…?
M.G.E: No, no me molesta… Es parte de este trabajo, de hacer conocer lo que estás haciendo… Igual preferiría estar en la pileta del hotel, pero bueno, hay que bancársela, y no es tan desagradable…
LadoB… Veinte años de carrera, María… Empezaste «profesionalmente» con Viuda e Hijas…
M.G.E: Y sí… Empecé a los quince años, más o menos, y ahora tengo treinta y ocho, así que sacá la cuenta… Después de las Viudas hicimos Maleta de Loca, empecé a tocar con Celeste Carballo, grabé varios discos, estuve un poco de sesionista, para descansar un poco de los proyectos personales, que me requerían mucha energía y mucho tiempo, y después de eso formé el grupo Las Chicas, que fue un grupo con las dos cantantes de Los Twist, con una bajista que ahora está en España, y una baterista; hacíamos algo medio «hardcore», un power trío con dos cantantes, y ahí fue donde me vio tocar Charly, que en realidad me conocía, de la época de las Viudas, pero ahí como que había más lucimiento, me vio hacer unos solos, y se recopó, y me invitó a tocar…
LadoB… Me parece, a la luz de los años, que Viudas… no era visto por esa época, tanto por la prensa como por los propios músicos, como algo demasiado «serio»…
M.G.E: Nooooo, nos odiaban (risas). Vendíamos millones de discos…
LadoB… Que era mentira, además…
M.G.E: No, ¿por qué mentira…? Vendíamos muchísimo, como trescientosmil… Lo que pasa es que nos cagaron las discográficas… (se ríe…). Era la época en que los artistas no tenían abogados, era todo como más… «hippy». No hippy, pero había demasiada «confianza», éramos chicas… Imaginate que el contrato lo leyó mi hermano, yo era menor de edad, y mi mamá en vez de llevar un abogado llevó un familiar, y sí, claro, para la época nos tenían así, medio menospreciadas, que éramos mujeres, que vendíamos discos, que tocábamos en lugares multitudinarios, que nos pintábamos, que nos poníamos trajes raros, qué se yo, ¡éramos un plomo para la gente estática y rígida! Era muy difícil adaptarse a esa nueva forma, pero de pronto muchos músicos se empezaron a batir el pelo, a pintar los pómulos, no sé por qué razón, éramos un poco «de avanzada» para la época.
LadoB… Le sumo a eso el hecho de que fueran mujeres…
M.G.E: Hay una cosa basada en que las mujeres «no venden» discos. Es como un lema de las discográficas. Sí pueden vender artistas melódicos, que les ponen millones de pesos encima, pero parece que el rock tiene que salir «mágicamente», no le quieren poner apoyo económico… Y este nuevo disco salió como siempre, con un apoyo de DBN, pero en una forma… a «Pulmonizer» se llama. Y ya tengo el video nuevo que lo hizo un amigo, o sea es todo así, amigos talentosos… Mariela Chintalo, que es la saxofonista que toca con Charly, que es amiga, me hizo unos dibujitos, y el personaje del video es ese dibujito…
LadoB… Una empresa «familiar», digamos…
M.G.E: Sí, de amigos, gente con talento que en vez de no hacer nada, porque no hay trabajo, por lo menos vamos generando cosas entre todos, y nos sirve a todos. Y ahora en mayo voy a presentar el video en Buenos Aires, con un lindo show, con pantalla, y tocando en vivo, situación que en realidad quedó pendiente de… ¡mirá qué día…! Era el 20 de diciembre la presentación; imaginate qué lindo día… y bueno, viendo cómo se sigue subsistiendo en la Argentina. Hay que ver los huecos…
LadoB… ¿Y cómo se sigue subsistiendo en Argentina…?
M.G.E: Es muy difícil, no se puede programar mucho, ahora te digo «en mayo», pero no se sabe. No se puede hacer proyectos, eso es lo que más me pone mal, porque en realidad yo tengo dónde vivir, como, no estoy grave como mucha gente, bah, como la mayoría. Pero a nivel de mis proyectos me traba mucho eso, el no poder proyectar, y ver la gente alrededor que está deprimida, como que se te viene una nube y querés pararla, y en general trato de ser optimista y poner buen humor, pero a veces me supera, la gente alrededor está muy mal, y es difícil. Y mientras estoy estudiando si sigo grabando la segunda parte de «Pocketpop», o un nuevo disco, porque este quedó tan lindo que tiene como una personalidad propia. Y aparte por los problemas económicos, iba a sacar el disco este año, ahora voy a esperar, me voy a relajar, porque también me hago mucha mala sangre, con esto, el estudio, DBN, no estás haciendo música, estás haciendo «oficina», y me aburre. Entonces prefiero tocar en vivo, divertirme, y cuando sea el momento adecuado…sacar algo, pero en realidad no sé. Pero el ser independiente es así, es costoso, pero está más bueno. Realmente tenés el manejo de tu disco, podés distribuirlo afuera, podés venderlos en los shows, tenés más libertad.
LadoB… Además de seguir tocando en la banda de Charly…
M.G.E: Sí, ahora nos vamos a Ecuador, después nos vamos a una gira por México, y allá estoy viendo para editar mi disco… Voy haciendo así, «cositas»; mi vida es haciendo la música, viajar, e ir teniendo pequeños logros. Me siento muy contenta de tener «Pocketpop», me encantaría poder ser más ambiciosa y decir «Bueno, quiero el estreno mundial» pero vivo en la Argentina, me ha tocado ser mujer…
LadoB… Peor sería si vivieras acá…
M.G.E: No sé, Montevideo es un lugar que me gusta mucho, y sé que es un lugar más pequeño a nivel de mercado, pero bueno, puedo venir… todavía (risas).
LadoB… Tu música es una pieza bastante «rara» dentro de la música rioplatense, que por ahí no entra del grosero rótulo de «Rock»…
M.G.E: No, para nada. Es muy limitado «ser de rock». Yo tengo una formación de jazz, tengo varios estilos de música, y creo que se nota en lo que hago, hay de todo un poco. No, no me gusta encasillarme, y menos así, en «rock»; es una postura, una forma de vida que yo no vivo, me parecería hipócrita decir «soy esto», cuando no lo soy.
LadoB… El otro día vi en televisión un viejo video de Viuda e Hijas…, ¿sos nostálgica de esos años…?
M.G.E: No, para nada. No por nada especial, pero fue una época de adolescentes, que nos divertíamos con cualquier cosa, de ingenuidad. Fue ese momento. Y esas personas. Con las chicas estamos siempre en contacto, vía e-mail, somos muy amigas, pero estamos cada una en cosas distintas, y no me veo otra vez en eso. De repente si volviéramos sería ya otra cosa, y no sé si va a estar bueno; no me gustan las vueltas que no son apasionadas. En general los grupos vuelven por dinero, por una buena propuesta comercial, y para mí volver a tocar con las Viudas tendría que ser algo muy «romántico».
LadoB… Por tus dos carreras paralelas estás acostumbrada a tocar tanto en lugares pequeños como en grandes estadios… ¿qué preferís…?
M.G.E: Uh… En estadios me gusta. Me gusta porque es cuando toco con Charly, y ahí me siento muy segura porque el artista es él , y yo estoy atrás, apoyando…
LadoB… Supongo que Charly también se siente seguro teniéndote a vos en la banda…
M.G.E: No, no creo (risas), pero he tocado en lugares grandes con mi banda, y me gusta, me da un poco más de miedo, porque soy más estática; canto y toco todo el tiempo, y estoy más atada al micrófono, y soy muy tímida, pero igual me gusta. Ahora, también me gusta mucho tocar en lugares chicos, íntimos, pero también me dan miedo, tengo como todas las sensaciones juntas.
* Esta entrevista fue realizada en 2002, horas antes de la actuación de María Gabriela Epumer en «El Ciudadano» de Montevideo. Fue publicada en la desaparecida revista virtual LadoB…, de la que no quedan rastros en la web. Epumer murió poco más de un añ0 después, en 2003.
Jorge Costigliolo 